lunes, marzo 2

Carlos Manuel Espinosa Espinosa



Catedrático, Maestro y formador de hombres





“Todo el que pasó por su aula aprendió a escribir.

Tenía una enorme simpatía y tal manera de enseñar

que aliviaba todas las majaderías

de la gramática, la ortografía, de la sintaxis.

Y publicaba una revista en la cual sus alumnos colaborábamos,

y así aprendíamos, sin darnos cuenta.

Y organizaba también sabatinas,

en las que discutíamos toda clase de cosas.

Y así también aprendíamos, sin darnos cuenta….”



“Alejandro Carrión”





Carlos Manuel Espinosa ha sido un hombre de cultura, un hombre de letras. Justamente la pléyade de intelectuales lojanos de algunas generaciones y hasta nuestros días, han asimilado sus enseñanzas en el vastísimo campo de la literatura.  Quienes fueron sus discípulos brillan hoy, en el arte, en la política, en el periodismo, en la poesía. Fue en verdad, un formador de hombres.



Nace en Loja el 2 de marzo de 1896. Fueron sus padres el Dr. Manuel H. Espinosa y la Sra. Isabel María Espinosa. Contrajo nupcias con la Sra. Delia Vélez con quien  procreó  tres hijos: Irma, Edith y Franklin.



Sus primeros estudios los realizó en la ciudad natal, con profesores particulares, terminando la primaria en la escuela “Miguel Riofrío”. Los secundarios los siguió en el Colegio Bernardo Valdivieso, en el que obtuvo el título de Bachiller.- Los estudios superiores los hizo en la “Junta Universitaria de Loja” –hoy Universidad Nacional- en la que se graduó como Doctor en Jurisprudencia.



Su labor en la Administración Pública se resalta por su pulcritud y honestidad, se inicia como Secretario del I. Concejo Municipal de Loja, del que posteriormente pasó a ser Procurador Síndico y Director de su Departamento de Cultura. Por muchos años desempeñó la Cátedra de literatura en el Colegio “Bernardo Valdivieso”, llegando a ser su Vicerrector y Rector.- En la Universidad Nacional de Loja fue profesor de Historia del Derecho de la Facultad de Jurisprudencia y Vicerrector de la misma; y profesor de Literatura en la Facultad de Ciencias de la Educación, luego de ser uno los creadores de dicha Facultad. Fue el primer Rector del Colegio nocturno “Leones de Loja”, luego sección nocturna del Colegio Bernardo Valdivieso.- Diputado y Representante de la Provincia ante el Congreso Nacional.- por varias ocasiones desempeñó el cargo de Gobernador de Loja.- Presidió el directorio de la Sucursal del Banco Nacional de Fomento en nuestra ciudad.- Fue el fundador y Primer Presidente del Núcleo de Loja de la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Y entre sus nombramientos honoríficos se hallan los de Miembro del “Grupo América” y de la “Sociedad Jurídico-Literaria”, ambos de la Capital de la República.



La obra literaria del doctor Carlos Manuel Espinosa es extensa. Sin embargo, se halla inédita en su mayoría, entre ellas cuentan: “Poesías del Ayer distante”, “Crepúsculos del Oro. Prosas Íntimas”, “Cuentos de la Tierra”, “Loja en la poesía”, “Sin velas, desvelado… Memorias de un mal estudiante”, “Historia de la Literatura de Loja”.



A pesar de haber incursionado en el campo político como hombre culto y patriótico, su vida habría de dedicarla más bien a la labor pacífica, tranquila y espiritual de la faena literaria y cultural, a la que se pertenecía por entero, por nacimiento y por convicción.



José Benigno Carrión, dice de Carlos Manuel Espinosa; “En el blanco apostolado de la docencia, comprendió con fina y penetrante intuición, con claro talento, el corazón y la mente de los jóvenes. Tenía la certeza que tan solo la bondad, muchas veces incomprendida era el camino verdadero para penetrar en esa urdimbre compleja y difícil que constituye el alma juvenil…”



Manejaba el idioma castellano, con elegancia pocas veces vista. Supo dirigir a sus alumnos por la senda literaria a través de Revistas importantes que él creó y dirigió, como “Hontanar”, cuyo número inicial apareció a principios de los años treinta, en la que dieron sus primeros pasos en la belleza literaria Angel Felicísimo Rojas, Alejandro Carrión, Juan Iván Cueva, Jorge Hugo Rengel, Augusto Mario Ayora, Gustavo Serrano, Jorge Suárez…Formó parte de la “Revista del Colegio Bernardo Valdivieso” y  la “Revista Universitaria”.



En “Hontanar” y otras revistas de las que fue dirigente y redactor como: “Fervor”, “Bloque”, “Burbuja”, quedan sus sentimientos de búsqueda de un nuevo edificio social, del sentimiento íntimamente humano; cuando en sus declaraciones, constantes de sus múltiples cuentos publica:



… “Al paso tardo de la yunta el arado iba desgarrando el lomo del rastrojo. Apoyado en la mancera don Romualdo, con las piernas vacilantes sobre la tierra removida, pica las ancas de los bueyes que extendían las services temblorosas de la fatiga del supremo esfuerzo. Y la yunta halaba del timón: halaba sin descanso….”



También surca la poesía con el fino estambre del caballero que musita el verso en armonía del alma y el sentimiento universal y gime en la boca del poeta: “seguí la huella de tu leve sombra”/como un pobre ciego al tierno guía./Y fuiste para el tedio de mi alma,/como una luz de aurora en mi ocaso: Llamé a tu corazón como un mendigo/ a la puerta de un hogar cerrado:/ señora, por piedad, dame un alivio/ que el hielo de la soledad me mata.





Pedro Tinto, escribe en 1981 en Diario “El Telégrafo”; “Carlos Manuel Espinosa. La imagen viva de la serenidad sabía crear el clima propicio para el diálogo amable y profundo. Su conversación era fluida, ilustrada, matizada de un fino y cálido humorismo, llena de recuerdos y anécdotas. Jamás de sus labios salió palabra que no sea alta, pura, inspiradora y humana.



Muere en Loja el 1ero. de abril de 1981; El hombre de Cultura, el exquisito poeta, experto narrador, Maestro entre los buenos,. Y aunque no ha publicado gran parte de su producción literaria y filosófica, nos ha dejado en numerosas publicaciones nacionales y extranjeras, muestras inmarcesibles de sus talentos. Pero quienes gozaron de sus elevadas notas magistrales, supieron recoger sus enseñanzas y plasmar en obras de gran valor los conocimientos estilísticos que él les impartiera en sus proficuos años de maestro de juventudes.




Fuente: A la memoria del Dr. Carlos Manuel Espinosa, proporcionado por la familia.

Villacís, Molina Rodrigo, Palabras Cruzadas. Banco Central del Ecuador, 1988
Primicias Lojanas: Colegio Eugenio Espejo, CCE/Paulina Jaramillo Valdivieso.

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